Comer menos carne, la solución para disminuir el Calentamiento Global
Aunque esta noticia se dió a conocer en septiembre del año pasado, fue hasta hace unos días que la conocí, noticia que sin duda es un duro golpe a la dieta del norte de México especialmente la ciudad de Monterrey.
Pues el muy excelso grupo de científicos que se encarga de realizar investigaciones acerca del Calentamiento Global en cabeza de Rajendra Pachauri, Presidente Intergubernamental sobre Cambio Climático (además de Premio Nobel), indica que existen datos que muestran que la producción de carne envía a la atmósfera más gases efecto invernadero que el transporte automotor.
"El Fondo de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) estima que las emisiones directas de la producción de carne, representan aproximadamente el 18% de las emisiones totales de gases con efecto invernadero", dijo Pachauri.
"Entonces quiero destacar el hecho de que entre las opciones para mitigar el cambio del clima, el cambio de dieta es algo que habría que considerar."
El dato de la FAO del 18%, incluye los gases con efecto invernadero liberados en cada parte del ciclo de producción de carne: limpieza de la tierra, transporte de fertilizantes, quema de combustibles fósiles en vehículos de granja, y las emisiones delanteras y posteriores de ganados y ovejas.
En contraste, el transporte aporta solamente el 13% de la huella de gas invernadero del género humano, según el PICC.
El doctor Pachauri hará una disertación en una reunión organizada por Compassion in World Farming (CIWF), que apoya la baja en el consumo de carne, porque reduciría el número de animales en granjas industriales.
La embajadora de CIWF, Joyce D'Silva, dice que el ejercicio de pensar sobre el cambio climático podría estimular a la gente a cambiar sus hábitos. "Las encuestas muestran que la gente está ansiosa sobre su huella personal de emisiones de carbón, de recortar sus jornadas en automóvil y demás, pero puede que no se den cuenta de que cambiando lo que hay en su plato podría lograrse un efecto mucho mayor."
El problema principal es el metano (CH4) que se produce en el intestino de los animales como consecuencia de la manera en que hacen la digestión. Una molécula de Metano añade 24 veces más calor a la atmósfera que una de CO2. Por lo tanto, aún cuando emitimos mucho menos que CO2, el metano contribuye en un 12% al cambio climático global. El Metano generalmente se produce cuando hay descomposición anaeróbica de la materia orgánica, es decir, cuando es consumida ("comida") por bacterias en un ambiente sin oxígeno (como sucede con las vacas)
Una vaca puede producir de 100 a 200 litros de metano cada día. Algunos investigadores aseguran que suministrar una simple pastilla a los animales podría reducir las emisiones, pero son muchos los científicos en Irlanda que dudan de la efectividad de este método.
Otros están trabajando en la creación de nuevas razas de ganado que se desarrollarán mucho más rápido, lo que hará que emitan menos metano por el hecho de que vivirán menos tiempo.
En conclusión, se debe disminuir el consumo de carne debido a las flatulencias producidas por las vacas, ahora que están investigando eso deberían ver el impacto que para el medio ambiente tiene que 6,000 millones de personas arrojen diariamente a la atmósfera sus flatulencias, sería también un buen estudio.
Pues el muy excelso grupo de científicos que se encarga de realizar investigaciones acerca del Calentamiento Global en cabeza de Rajendra Pachauri, Presidente Intergubernamental sobre Cambio Climático (además de Premio Nobel), indica que existen datos que muestran que la producción de carne envía a la atmósfera más gases efecto invernadero que el transporte automotor.
"El Fondo de Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO) estima que las emisiones directas de la producción de carne, representan aproximadamente el 18% de las emisiones totales de gases con efecto invernadero", dijo Pachauri.
"Entonces quiero destacar el hecho de que entre las opciones para mitigar el cambio del clima, el cambio de dieta es algo que habría que considerar."
El dato de la FAO del 18%, incluye los gases con efecto invernadero liberados en cada parte del ciclo de producción de carne: limpieza de la tierra, transporte de fertilizantes, quema de combustibles fósiles en vehículos de granja, y las emisiones delanteras y posteriores de ganados y ovejas.
En contraste, el transporte aporta solamente el 13% de la huella de gas invernadero del género humano, según el PICC.
El doctor Pachauri hará una disertación en una reunión organizada por Compassion in World Farming (CIWF), que apoya la baja en el consumo de carne, porque reduciría el número de animales en granjas industriales.
La embajadora de CIWF, Joyce D'Silva, dice que el ejercicio de pensar sobre el cambio climático podría estimular a la gente a cambiar sus hábitos. "Las encuestas muestran que la gente está ansiosa sobre su huella personal de emisiones de carbón, de recortar sus jornadas en automóvil y demás, pero puede que no se den cuenta de que cambiando lo que hay en su plato podría lograrse un efecto mucho mayor."
Vacas contaminantes
El problema principal es el metano (CH4) que se produce en el intestino de los animales como consecuencia de la manera en que hacen la digestión. Una molécula de Metano añade 24 veces más calor a la atmósfera que una de CO2. Por lo tanto, aún cuando emitimos mucho menos que CO2, el metano contribuye en un 12% al cambio climático global. El Metano generalmente se produce cuando hay descomposición anaeróbica de la materia orgánica, es decir, cuando es consumida ("comida") por bacterias en un ambiente sin oxígeno (como sucede con las vacas)
Una vaca puede producir de 100 a 200 litros de metano cada día. Algunos investigadores aseguran que suministrar una simple pastilla a los animales podría reducir las emisiones, pero son muchos los científicos en Irlanda que dudan de la efectividad de este método.
Otros están trabajando en la creación de nuevas razas de ganado que se desarrollarán mucho más rápido, lo que hará que emitan menos metano por el hecho de que vivirán menos tiempo.
En conclusión, se debe disminuir el consumo de carne debido a las flatulencias producidas por las vacas, ahora que están investigando eso deberían ver el impacto que para el medio ambiente tiene que 6,000 millones de personas arrojen diariamente a la atmósfera sus flatulencias, sería también un buen estudio.